Nuestro país y particularmente nuestra provincia han estado atravesadas por diferentes contingencias que la han hecho vulnerable antes y durante la democracia que llevamos ya hace varios años.
Estas contingencias a que me refiero por otro lado han hecho malograr la educación, algo preponderante para ser socialmente equitativo y que nos ayudó a enorgullecernos como argentinos por el cual fuimos ejemplo en otras épocas para el contexto si se quiere mundial.
Llegamos a tener premios nobel en ciencia como Bernardo Husain, Leloir, Milstein, además otros grandes profesionales que se han destacado en diferentes ramas, apostando siempre a la educación.
La fragmentación, la desigualdad, la concentración económica nos han arrastrado a un punto tal de desintegración social repercutiendo esto en las personas volviéndolas cada vez más individualistas, valor que no es una ventaja para una sociedad sino al contrario podemos en última instancia perder aquello que queremos alcanzar.
Debemos por lo tanto mirar con buenos ojos y rescatar aquellos valores que nos pueda representar como pueblo, destacando la dignidad que cada uno debería tener y no ser un mero objeto de intereses personales.
Aquella dicotomía referida a la cantidad y caridad educativa deberíamos dejarla de lado puntualizando objetivamente que la calidad educativa de la que poco se habla tiene un interés peculiar y hace por si misma a una buena educación, por cierto sin perder de vista la cantidad educativa que integraríamos como parte de nuestra problemática.
Creo que se debería hacer una buena inversión, ya no solo en el salario docente, el cual es fundamental porque los tiempos son diferentes y mucho de estos viven de ese sueldo únicamente; sino también en infraestructura como aulas, baños y todo aquello que mejore las condiciones de un establecimiento como calefacción, bibliografía, etc.
En esto tengo lamentablemente una experiencia negativa porque tanto la calefacción sin existencia afectando la salud del docente y alumnos, la bibliografía que en muchas ocasiones tiene que llevarla el profesor para que se cumplan los objetivos.
Los baños deberían ser lo más higiénicos posibles en un lugar que se ha hecho para enseñar, matafuegos, buen sistema eléctrico que sirva a la seguridad del colegio educativo.
Una escuela debe estar para enseñar porque esa es su función y no estar a la cola de las circunstancias, por lo tanto tendría que tener lo mejor para demostrar a la comunidad que está para enseñar; el conocimiento es parte esencial en la salud, la economía y todo lo que tenga que ver con la persona, esto lo digo porque una buena salud no solo se consigue con una economía saneada sino con una buena educación conociendo aquellos factores que nos puedan hacer perder la salud.
Existen hechos que podríamos plasmar para ejemplificar lo que estoy afirmando; también tendríamos que decir por otro lado que los alumnos deberían tener posibilidades para estudiar, porque sabemos de muchos casos con gran capacidad intelectual pero no pueden continuar por su carencia económica teniendo que obligatoriamente abandonar.
Otro tema serían los que educan, creo que semejante responsabilidad pasaría por tener un terciario completo o universitario que lo habilite para enseñar y poder demostrar conocimiento del tema a desarrollar, en este sentido debo decir que algunos con secundarios llegan a ser directores de escuela y otros son docentes con primarios sin completos; esto es un maltrato a la educación y al alumno que solo se llevan adelante por intereses y no pensando en una educación excelente, la resolución de estos inconvenientes crea un espacio sincero para todos porque la educación excelente tiene que ser para todos iguales y no solamente para sectores privilegiados, esto debe ser así si queremos un país sin prejuicios sociales, ayuda también a la democracia verdadera y a un federalismo que hoy en día se ha puesto sobre el tapete, con esto evitamos la fragmentación sin tener escuelas de primera y segunda categoría, lograr las mismas oportunidades para todos llevando condiciones a aquellos que están más alejados de los centros urbanos, tendríamos de esta manera un país más igualitario en sus conocimientos evitando la concentración que no ayuda para nada; pensar en un país más federal, flexible y abierto, preocupándonos por nuestra sociedad y quitándonos el velo de la mezquindad logrando para todos la igualdad que necesitamos, de esta manera se podría vivir bien en democracia concediendo a nuestros semejantes la confianza que necesitan, introduciendo valores que son importantes en nuestro quehacer diario.
No hagamos de nuestras vidas un descrédito, logremos un mejor entendimiento y honestidad que nos caracterice como sujetos llegando a obtener la ansiada libertad y poder proyectarnos como personas en un futuro inmediato.
Profesor Dr. Luis E. Acosta
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